Los robos siempre han sido el dolor de cabeza más grande para los vecinos que denuncian la inseguridad en La Capilla, una zona de la calle principal de La Guardia en el municipio Díaz.
En este lugar asaltan sobre todo si es de noche. Los delincuentes se aprovechan de la oscuridad y de los terrenos baldíos para esconderse.
Las personas que habitan la zona y los que transitan también, describen que hay veces que solo se escucha el silencio de la noche y las ráfagas de disparos en ese camino que inspira terror. En el mismo han dejado sin vida a más de uno y de eso es testigo la comunidad.
Nelly Marval, transita por La Capilla, y cuenta que a ella le da miedo caminar por allí porque el camino es muy solitario e inseguro, como muchas otras zonas de la población.
“Cuando vengo de trabajar tengo que avisarle a mi esposo o a alguien de la familia que me venga a esperar en la vía porque llego tarde y me da pavor irme sola, por temor a que alguien pueda estar escondido y me haga daño”, refiere.
Además de la inseguridad en La Capilla, ¿qué otro problema hay en el pueblo?
Luis López, quien también transita por el lugar, manifiesta que hace unos meses a él le quitaron un teléfono y un dinero que llevaba en el bolso, prefirió darlos antes de recibir un disparo.
“Yo iba caminando hacia la Bello Monte, ya eran pasadas las nueve de la noche, cuando sentí que me perseguían y eran unos chamos jovencitos que me dijeron párate con un arma en mano. Me dejaron sin teléfono y sin dinero, pero salvé mi vida”, dice.
La población le hace un llamado al Gobierno Regional de Morel Rodríguez Ávila para que garantice verdaderamente la seguridad en el estado. Que se haga sentir la presencia de los funcionarios policiales en la calle, resguardando la tranquilidad de la gente.
Dicen que “hasta cuando” van a permitir que bandas delictivas hagan de las suyas en las comunidades. Piden que los cuerpos de seguridad se metan en cada rincón y acaben con el hampa.
Cada día que pasa se abren más huecos en la carretera y esto trae como consecuencia el desgaste de los vehículos, por eso más de un conductor se queja del estado en que se encuentra la vialidad.
Reconocen lo difícil de la situación país, pero solicitan que se le meta una manito a la carretera para poder circular tranquilamente sin el temor de caer en un hueco.